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Entrevistando a la Lic. Gabriela Zabalza

Lic. Gabriela Zabalza

La Lic. Gabriela Zabalza es Nutricionista, atiende en Centro Cinesia, Consultorios Integrales de Salud en la Ciudad de Neuquén, Neuquén, Argentina. Además de haber colaborado en varias oportunidades con Fimedi NET, asisitó recientemente al XIII Congreso Argentino de Graduados en Nutrición en la ciudad de La Plata, por lo que en esta oportunidad nos compartió algo de su experiencia.

Licenciada Zabalza, ¿Cómo fue su primer contacto con el mundo de la nutrición?

¡Qué pregunta! Creo que “mi primer contacto con el mundo de la Nutrición” fue durante mi infancia, en mi casa, cuando todavía necesitaba arrimar un banquito a la mesada ¡para “ayudar” a mi mamá a cocinar! Ella nos enseñó a comer ¡de todo! Cuando me tocó decidir Carrera Universitaria -quizá inconscientemente- uní mi gusto por las Ciencias Biológicas con esa experiencia de nutrición cotidiana, placentera y natural que traía arraigada.

¿Nos describiría un día habitual de trabajo en su consultorio?

Un día habitual de Consultorio me resulta apasionante. Aunque la rutina suele ser la misma: mediciones antropométricas, anamnesis alimentaria, revisión de resultados de laboratorio, carga de datos en sistema, no hay nunca un día igual a otro, porque cada paciente es un mundo y las vivencias trabajadas son siempre nuevas. Me gusta dedicar tiempo de calidad a cada persona, las aristas de nuestra alimentación son tantas que, si no encontramos los “resortes clave”, posiblemente no lleguemos a un cambio favorable.

Según su punto de vista, ¿Cuáles son los principales desafíos de trabajar en este área?

Los desafíos dependerán del terreno en que el Nutricionista de desenvuelva (sanatorios, consultorio, geriátricos, deporte de alto rendimiento, etc.). En Consultorio, los principales desafíos se vinculan a “lograr redescubrir e instaurar los buenos hábitos para una vida saludable“: desde la selección variada de alimentos, la disminución del tiempo sedente y la incorporación de ejercicio físico como algo habitual, el abandono del cigarrillo o alcohol en algunos casos o el volver a comer sin culpa y con placer en otros.
Y si pienso en Salud Pública Global, quizá el desafío más exigente sea encontrar solución al avance de la Obesidad y sus comorbilidades, epidemia que casi se ha triplicado desde 1975, a nivel mundial, según datos de la OMS – Organización Mundial de la Salud.

¿Qué es lo que la gente busca en un nutricionista?

Las personas llegan al consultorio buscando principalmente un espacio de atención personalizada, donde pueda exponer su situación y encontrar el soporte para ordenar su Alimentación (y/o la de su familia). Buscan mejorar su calidad de vida, su nivel de energía, o corregir parámetros desviados en sus análisis de rutina. Escucha activa, empatía y seguimiento, son quizá las aptitudes más valoradas.

Según su experiencia, ¿observa algún cambio significativo en la percepción pública sobre la nutrición?

Sí, noto un cambio en la percepción pública respecto a Nutrición. Hoy todo el mundo habla de Nutrición, especialistas y no especializados. Se habla de Nutrición en la escuela, en las reuniones de mamás, en los clubes, dietéticas, gimnasios, consultorios de diferentes disciplinas, en las redes sociales, etc. Tiene la ventaja de concientizar o volvernos más atentos a lo que consumimos cada día, pero la desventaja de estar bombardeados de información, muchas veces no profesional, desacertada, incorrecta e inadecuada según el caso clínico de cada persona.
Tanto a nivel individual como poblacional, es crucial la consulta a o la participación de un Licenciado en Nutrición.

¿Ud. chequea en sus pacientes la habilidad gastronómica que poseen?

Sí, considero importante chequear la habilidad gastronómica de nuestros pacientes y asesorarlos en técnicas culinarias; ¡la cocina es terapéutica! Y entusiasmarse con recetas saludables o incorporar técnicas de cocción o combinación de alimentos para aumentar la biodisponibilidad de nutrientes o disminuir la de otros.

¿Considera apropiado asesorar gastronómicamente a los pacientes?

Sí. El intercambio con los pacientes siempre es enriquecedor, cada persona trae un bagaje amplio de platos conocidos y significativos a nivel individual o familiar, y no podemos dejar de considerar ese aspecto a la hora de aconsejar sobre su nutrición.

Hace poco menos de un mes tuvo lugar el XIII Congreso Argentino de Graduados en Nutrición en la ciudad de La Plata al cual Ud. asistió. ¿Qué le pareció -en rasgos generales- el desarrollo del mismo?

El Congreso de Graduados en Nutrición me ha parecido realmente muy bueno. Sobre todo el nivel de las ponencias en general, los ejes temáticos propuestos y el cumplimiento puntual del Programa científico durante los 3 días. Este tipo de eventos nos da la posibilidad de escuchar a grandes referentes de la Nutrición, intercambiar experiencias con colegas de todo el país, mantenernos actualizados y sobre todo renovar ese espíritu de servicio con el que atendemos a nuestros pacientes cada día.

¿Se encontró con avances específicos en el área de la nutrición?

Sí, en un Congreso uno encuentra un mix entre la profundización de los temas de siempre y los avances científicos sobre temas más recientes. Podría citar, como ponencias interesantísimas aquellas que abordaron la importancia de la microbiota intestinal y el impacto de su equilibrio sobre la salud; o las que profundizaron sobre Nutrigenética (disciplina que estudia cómo nuestras diferencias genéticas marcan una determinada respuesta a un patrón dietético) y Nutrigenómica (disciplina que estudia cómo los nutrientes impactan en la expresión de los genes).

¿Considera que tales conocimientos son aplicables en la consulta diaria?

Sí, son conceptos aplicables. Sobre todo los relacionados al mantenimiento de la microbiota intestinal, al tratamiento de los síndromes de intestino irritable, que suelen verse tanto en Consultorio. Otros temas como los relacionados a Nutrigenómica requieren una formación especializada y la aplicación de tests específicos que no están al alcance en una consulta corriente ni en cualquier parte del país.

¿Cree que el campo de la tecnología en información juega un rol significativo en el registro de pacientes y su correspondiente control nutricional?

Sí, por supuesto. Necesitamos agilizar el registro de datos clínicos, visualizar avances a través de gráficos, mostrar la información de manera sencilla a nuestros pacientes y por otro lado asegurarnos de tener un resguardo informático serio que nos garantice no perder la información de nuestro trabajo y nos facilite el análisis de los datos recolectados. En este punto, la posibilidad de tener las Fichas Médicas Digitalizadas que brinda FIMEDI, es un gran aporte de profesionalismo al día a día de un Consultorio.

¿Tiene alguna reseña de interés que pueda compartir con los colegas que no pudieron asistir?

Varias, imposible resumirlas. Fueron muchos los ejes de temas desarrollados y, dependiendo de los intereses y especialización de cada profesional, cada quien asistió a determinadas ponencias, simposios, discusiones de pósters o talleres de trabajo.

Gracias por facilitarnos esta oportunidad de difusión. Para finalizar, se sabe que la gastronomía de la Patagonia se destaca por ser aventurera, ¿qué platos regionales, ricos y sanos puede recomendarnos?

Si hablamos de un plato, quizá una trucha alimonada con papines andinos y un salteado de hortalizas sería mi predilecto. ¡Pero no solamente un plato les recomendaría! Ante un paseo por Neuquén, los animaría a que conocer las chacras de nuestro Valle y cosechar deliciosas peras y manzanas, a participar de la recolección de frutas finas en alguna estancia especializada, a recorrer las bodegas y conocer sus secretos de hallazgos de huesos de dinosaurio en los tiempos de construcción (¡sello patagónico!) y a no irse sin llevarse un kilo de nueces exquisitas. Los animaría a que visiten Villa Pehuenia, villa de montaña encantadora a escasos 300km de Neuquén Capital, donde se cosechan los famosos Piñones, frutos de la Araucaria o Pehuén, que luego de ser procesados se utilizan para hacer harinas y fabricar panes, alfajores o pastas, para saltearlos con hongos cultivados en la zona, para hacer otras recetas típicas mapuches o volverlos jaleas dulces o puré. Toda una experiencia de sabores regionales.

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